martes, 31 de enero de 2012

Contaminación y mineria.

Queridos amigos:

En los últimos tiempos, numerosas comunidades han expresado su preocupación ante grandes proyectos mineros, que podrían afectar sus condiciones sanitarias y ambientales. Las mayores objeciones van contra la  minería a cielo abierto que utiliza procesos de lixiviación con cianuro.

El cianuro tiene una merecida mala prensa, y los méritos suficientes como para ser el malo de la película, como recordarán los lectores de Agatha Christie, en una de cuyas novelas a alguien le echan cianuro en el champagne.

Los especialistas dicen que es posible tenerlo bajo control, como hacen en muchas otras industrias, que no tienen una imagen pública tan desfavorable como la gran minería. Los posibles afectados no les creen y piensan que hay intereses económicos detrás de esa excesiva confianza.

¿Cómo pensamos este conflicto?

Tal vez nos ayude ubicar los problemas en el territorio en el que ocurren. En Argentina, los grandes proyectos mineros se localizan en zonas que son, a la vez, semiáridas y sísmicas.

Zonas semiáridas: Los grandes proyectos mineros consumen agua en cantidades difícilmente imaginables. Las leyes vigentes ordenan que antes de cada proyecto se realicen estudios que procuran estimar el daño que ese proyecto haría al ambiente y la forma de evitarlo o paliarlo. Como siempre, la trampa se hace casi antes que la ley y las empresas entregan estudios incompletos.

Habitualmente, los estudios de impacto ambiental que entregan las empresas mineras no hacen un balance de la disponibilidad de agua para el conjunto de actividades de la zona. En nuestras zonas andinas, el agua no sobra. La que hay se utiliza toda, a punto tal que Mendoza se niega a soltar agua para las actividades productivas de la Provincia de La Pampa. Está claro que para hacer gran minería allí hay que dejar de hacer otra cosa, tal vez dejar secar los viñedos o abandonar las ciudades. Por eso Mendoza tiene una ley que prohíbe la gran minería con cianuro[i]. No por extremismo ecológico sino por simple sentido común.

Agreguemos que el cambio climático está haciendo que cada vez nieve menos en la cordillera, en una zona en la que los ríos son de deshielo. Y que algunos proyectos (como Famatina y Pascua Lama), no sólo consumirán grandes cantidades de agua donde es escasa, sino que pueden poner en riesgo los mismos glaciares de la que surge.

Zonas sísmicas: Cualquier estudiante de economía podría preguntarse cómo hacen las mineras para generar grandes ganancias, teniendo en cuenta el costo de remover y tratar miles de toneladas de roca para obtener una pequeña cantidad de los minerales buscados.

La respuesta es que, a diferencia de otras actividades industriales, la gran minería no hace una gestión integral de sus residuos peligrosos: simplemente los acumula. El secreto de la rentabilidad es ése: dejar los residuos peligrosos sin tratamiento. Lo que hacen es construir los llamados diques de colas, que son reservorios de millones de metros cúbicos de desechos líquidos y barros con cianuro, arsénico, plomo y demás metales pesados. Estos residuos peligrosos pueden filtrar al subsuelo y desbordar en los ríos y arroyos. Una vez terminada la explotación quedan abandonados. Se supone que la empresa tiene responsabilidad sobre ellos, pero si es una corporación del exterior, no será sencillo obligarla a hacerse cargo si hay problemas.

¿Durante cuánto tiempo permanecen peligrosos esos residuos? Como son metales pesados, serán peligrosos mientras exista vida sobre la Tierra.

Las empresas alegan que se trata de estructuras antisísmicas. Sin embargo, el reciente terremoto y tsunami de Japón de mostró que, ante los hechos, no todas las estructuras calificadas como antisísmicas resisten un terremoto.

De modo que hay riesgo de dispersión de contaminantes que afecten la cada vez más escasa agua usada por los valles cordilleranos, y esos riesgos no desaparecen con el final de la explotación cuando se agoten los minerales, sino que permanecen latentes para siempre.

En algún momento del debate se prometió que las autoridades nacionales y provinciales controlarán que las empresas actúen con la misma tecnología y las mismas precauciones ambientales que en el llamado Primer Mundo. Para ver en qué consisten esas precauciones, les acerco las fotografías de dos casos de rotura de diques de colas y extrema negligencia empresaria, ambos en países europeos:

1 - Rotura de la presa de contención de la mina de Aznalcóllar (Sevilla), el 25 de abril de 1998, y

2 – Derrame tóxico en una mina de bauxita, en Hungría, el 5 de octubre de 2010.

En ambos casos, las empresas habían jurado que las instalaciones eran seguras y las autoridades de ambos países dijeron lo mismo. Y en ambos casos, las empresas se negaqron a hacerse cargo de su responsabilidad económica en los daños y la remediación. Los gastos estuvieron a cargo e los respectivos Estados. Los juicios, por cantidades inimaginables de millones de euros, continúan.

En esta entrega ustedes reciben:

·       Un informe fotográfico de ambos desastres ambientales, para que puedan evaluar qué representa la rotura de un dique de colas para los vecinos afectados. Pueden bajarlo de aquí:


Por el programa en que está presentado (Adobe Reader), la mejor manera de verlo es en Pantalla Completa (en inglés Full Screen) y avanzando con las flechitas del teclado.

·  El recordatorio de mi libro "Historia Ecológica de Iberoamérica" y el contacto con el editor para quienes estén interesados en él.
·       La obra de arte que acompaña esta entrega es “Entrada a la mina”, un mural del mexicano Diego Rivera, pintado en 1923. Pertenece al ciclo "Visión política del pueblo mexicano", y muestra las condiciones sociales de esta actividad en ese momento. Noten que algunos de los trabajadores llevan casco y otros un simple sombrero. No se ven botas de seguridad y en algunos casos, adivinamos que calzan huaraches, una especie de alpargata de fabricación casera.

Un gran abrazo a todos.

Antonio Elio Brailovsky

Comuneros de Jolsibaquil, Chiapas realizan bloqueo carretero.

San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. 27 de enero de 2012.
A LOS PUEBLOS DE CHIAPAS
A LAS COMUNIDADES, EJIDOS Y BIENES COMUNALES
A LOS ORGANISMOS DE DERECHOS HUMANOS
A LA OPINIÓN PÚBLICA
BOLETÍN DE PRENSA
Comuneros de los Bienes Comunales de Jolsibaquil, municipio de Tila realizan bloqueo carretero para no permitir entrada de Procuraduría Agraria (PA) y manifestar su rechazo al Fondo de Apoyo a Núcleos Agrarios sin Regularizar (FANAR).


Informamos que comuneros de los Bienes Comunales de Jolsibaquil y sus anexos, pertenecientes y simpatizantes  de la organización Laklumal Ixim-Nuestro Pueblo de Maíz-, iniciaron a partir de las 9:00 horas del día de hoy un bloqueo carretero a la altura de la comunidad Nueva Esperanza de la carretera Yajalón-Sabanilla en la zona norte del estado de Chiapas.
Esta decisión la tomaron los comuneros como una medida para manifestar su rechazo contundente al programa gubernamental de despojo llamado FANAR y denunciar la ilegalidad con que sigue conduciendo la Delegación en Chiapas de la Procuraduría Agraria (PA) encabezada por Arturo Orta Rodríguez, operando a través de Julio César Cruz Alfaro (Visitador agrario de Yajalón) y David Torres Zetina (Jefe de Residencia de Palenque) en su objetivo de introducir dicho programa en los Bienes Comunales de Jolsibaquil.
Señalamos que ha sido de nuestro conocimiento que Julio César Cruz Alfaro (Visitador agrario de Yajalón) actuando con la complicidad del Comisariado de Bienes Comunales han pretendido en este día  la realización de una asamblea de manera ilegal en la que se pretende imponer de forma definitiva el FANAR en Jolsibaquil, por lo que con fundamento en nuestros derechos consagrados en la Ley Agraria vigente y en el acuerdo de nuestra asamblea del 3 de enero de 2012, no les permitiremos  la entrada dentro de nuestras tierras comunales Bienes Comunales al personal de la Procuraduría Agraria (PA).
Denunciamos que durante esta semana ha sido del conocimiento de los comuneros que el Presidente del Comisariado de Bienes Comunales, Nicolás Álvarez Jiménez; el Presidente del Consejo de Vigilancia Pablo López Jiménez y algunos Representantes del Comisariado de Bienes Comunales de algunos anexos, junto al Visitador Agrario Julio César Cruz Alfaro han estado repartiendo a comuneros la cantidad de 100 pesos diciéndoles que es un adelanto del apoyo del programa Procampo y que si asisten en la asamblea que pretendían realizar en este día viernes y firman el acta definitiva de aprobación del FANAR se les otorgará el ingreso y apoyos del Procampo.
Esta acción ilegal de los funcionarios de la Procuraduría Agraria (PA) en el estado de Chiapas se suma a una larga serie de ilegalidades como la validación de actas de asamblea apócrifas como un artificio legaloide para justificar que su actuación es dentro del marco de lo que establece la Ley Agraria, cuando la realidad demuestra lo contrario, siendo que los comuneros han denunciado por distintos medios que nunca se realizó ninguna asamblea para aprobar y/o rechazar el FANAR con las formalidades que establece la Ley Agraria en sus artículos  22, 23 de la fracción VII a la XIV, 24, todos en relación al artículo 107 de la misma ley.
Por lo anterior, manifestamos que miente el Delegado en Chiapas  de la Procuraduría Agraria (PA) en Chiapas cuando señala mediante el oficio núm. DPA/SJ-002/12 de fecha 4 de enero de 2012 que “De lo plasmado en las actas de asamblea y minutas de trabajo, no se desprenden actos de engaños y mentiras, existiendo la firma de los asistentes tanto a las asambleas como a las reuniones de trabajo, por lo que de existir constancia de los engaños y mentiras que manifiestan se plantearon y, de ser estos violatorios de derechos, agrarios o contrarios a la legislación vigente, solicito se precisen estos, para en su momento de ser procedente aclararlos, precisarlos y dar una información fiel y apegada a la legalidad”.
Nuevamente hacemos un llamado a todas las comunidades, ejidos y organizaciones campesinas e indígenas de Chiapas para que no permitamos la estrategia de despojo de nuestras tierras impulsada por la Procuraduría Agraria (PA),  la cual por medio de mentiras, engaños, alteración del padrón de comuneros, validación de falsificación de actas y violando la Ley Agraria quiere imponer el FANAR
¡RESPETO A NUESTROS DERECHOS AGRARIOS!
¡RECHAZO TOTAL AL DESPOJO DE NUESTRAS TIERRAS COMUNALES POR PARTE DE LA PROCURADURÍA AGRARIA MEDIANTE EL ENGAÑO DEL PROGRAMA FANAR!
COMUNEROS DE LOS BIENES COMUNALES DE JOLSIBAQUIL, TILA.
LAKLUMAL IXIM NORTE-SELVA-NUESTRO PUEBLO DE MAÍZ

miércoles, 25 de enero de 2012

Minería: cavarnos la propia tumba


El estudio del economista estadounidense Thomas Michael Power, desmiente el discurso usado para justificar la actividad minera en los países en desarrollo y afirma que Estados Unidos, Canadá y Australia no se desarrollaron gracias a la minería sino debido a procesos institucionales, tecnológicos y empresariales más complejos donde la explotación minera no fue necesaria o suficiente para que se produjera. Una mirada sobre el impacto regional y local en esos países, negativo en lo económico y de mínima incidencia en las economías nacionales.

Textos seleccionados y adaptados por la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Esquel - Chubut - Argentina de "¿Excavando hacia el desarrollo? Una visión histórica de la minería y el desarrollo económico" de Thomas Michael Power, Catedrático y Director del Departamento de Economía de la Universidad de Montana. Publicado como investigación de especialista independiente en setiembre 2002.

Introducción

La narración simplista es una forma peligrosa de definir políticas de desarrollo económico. Por eso cuando se promueve la actividad minera como camino obvio –incluso necesario- para los países en desarrollo y sus regiones deprimidas que buscan el crecimiento económico sostenido, el sector minero y sus aliados aplican un "razonamiento por analogía histórica" que tiene forma de cuento popular repetido muchas veces.

Esta analogía que frecuentemente se pretende hacer de la experiencia de desarrollo con la minería de países como Estados Unidos, Canadá y Australia es equivocada porque la minería aisladamente nunca fue un factor estimulante significativo para el desarrollo económico de ninguna de esos tres países.

Esto no quiere decir que la minería no cumplió un rol en el desarrollo de las economías de esas naciones. Sin embargo, este rol fue mucho más sofisticado y complicado que el que presentan las narraciones interesadas que plantean los técnicos y funcionarios ligados al sector minero:

En esos países la minería estuvo relacionada a una transformación total de la organización empresarial y financiera, la educación y la investigación, la acumulación de capital humano y la expansión de la infraestructura y se vio fortalecida por instituciones políticas muy desarrolladas y estables que respetaban el cumplimiento de la ley, los mercados y la empresa privada.

Los valores culturales promovían una visión emprendedora de la oportunidad económica mientras las políticas públicas alentaron una distribución amplia de la tierra y los recursos que redujo la desigualdad en el ingreso.

Los tres países poseen territorios de gran extensión, con amplios mercados internos o externos limítrofes, protegidos por el alto costo del transporte y sus propias barreras comerciales, a la vez que –cuando el proceso de industrialización se puso en marcha- las tres naciones tenían altos ingresos. Eran países "pobres en mano de obra" pero "ricos en recursos naturales".

Casi ninguna de estas condiciones favorables es característica de los países en desarrollo, lo que hace que el "razonamiento por analogía histórica" sea inadecuado para evaluar estos países, siendo un planteo mecánico y demasiado simplista.

Las grandes inversiones en una industria específica (minería) para apoyar un sector determinado de la economía (las exportaciones) por sí mismas no estimularán el desarrollo económico sostenido. Se comprueba que mientras mayor es la dependencia de las naciones en desarrollo en las exportaciones basadas en recursos naturales, más lenta ha sido la tasa de crecimiento de su PBI per cápita.

Además, las inversiones que muchas corporaciones transnacionales quieren hacer en los países en desarrollo no apuntan la generación de oportunidades económicas variadas, una distribución más equitativa de los ingresos y la toma de decisiones democrática, ni se concentran en actividades económicas que promuevan el desarrollo del capital humano e institucional además de fortalecer la fuerza de trabajo y el medio ambiente.

Una propuesta indecente

La minería parece haber cumplido un rol importante en la historia del desarrollo y la consolidación industrial de Estados Unidos, Canadá y Australia logrando su crecimiento económico sostenido. Su historia sugiere que la minería tiende a atraer grandes inversiones y generar rentas considerables, que pueden financiar inversiones adicionales, estimular el desarrollo de la infraestructura de transportes, pagar salarios relativamente altos y apoyar el desarrollo de la industria manufacturera local para el procesamiento de los minerales.

Este razonamiento histórico propone que la minería puede ser potencialmente el "gran impulso" para que los países en desarrollo escapen a la "trampa de los bajos ingresos" que mantiene a muchos de ellos en la pobreza.

Pero la minería no sería un tema polémico si fuera "solo una industria más" con aspectos negativos y positivos similares a la mayoría de las demás actividades económicas.

o La minería hace uso intensivo de la tierra y de los recursos ambientales conduciendo muchas veces a una degradación ambiental significativa y duradera.

o Debido a que los precios de las materias primas minerales tienden a ser volátiles, el ingreso y el empleo en la minería también pueden ser inestables.

o Los proyectos mineros necesariamente merman o agotan los yacimientos minerales que explotan, con una vida útil limitada y habitualmente corta para cualquier proyecto.

o La minería tiende a requerir uso intensivo de capitales, utiliza tecnologías que disminuyen las necesidades de mano de obra y los rápidos cambios tecnológicos han reducido sistemáticamente las oportunidades de empleo local.

o También puede generar enormes excedentes sobre los costos y la lucha por el control y uso de esos remanentes puede ser improductiva e incluso violenta. Los altos salarios relativos y los excedentes relacionados a la minería también pueden exacerbar la desigualdad de ingresos , incrementando el conflicto social y la inestabilidad política.

Los proyectos mineros son presentados fuera del mundo desarrollado concentrándose en los supuestos beneficios potenciales para el desarrollo económico asociado a la propuesta minera, dándolos por descontado o como resultado de análisis muy informales.

El mito y la realidad

Las industrias basadas en los recursos naturales fueron importantes en diversas etapas del desarrollo económico de Estados Unidos, Canadá y Australia pero la industria minera no fue necesaria o suficiente para que se produjera. Después que los europeos arrebataron el control de Norteamérica y Australia a la población indígena radicalmente disminuida, no sorprende que en esa ocupación territorial se utilizara los recursos naturales. Si ese patrón inicial de actividades de colonización fue fundamental para el surgimiento de una economía moderna desarrollada exitosa es otro asunto. El hecho que un evento preceda a otro ni implica que le primero sea la causa del segundo.

Es muy interesante verificar que muchas de las naciones más prósperas del mundo no son ricas en recursos sino todo lo contrario. Territorios pobres en recursos naturales como Japón, Suiza, Irlanda, Hong Kong y Singapur son ejemplos obvios.

En la clasificación de países por la renta nacional por personal del Banco Mundial del año 2002, por lo menos la mitad de las 25 naciones más ricas son consideradas pobres en recursos naturales.

Es claro que el desarrollo basado en los recursos naturales no es necesario para un desarrollo exitoso y tampoco lo asegura. Las lecciones obtenidas del análisis detallado de muchos países son variadas y complejas y contradicen las conclusiones de aquéllos que usan la analogía histórica para abogar a favor de la minería en los países en desarrollo.

El análisis crítico de los datos de las economías de Estados Unidos, Canadá y Australia demuestran que cuando las economías de esos países iniciaban la industrialización y el camino del crecimiento económico sostenido, la minería y las exportaciones mineras no representaron una parte predominante de su economía. A lo sumo la minería logró picos circunstanciales de solo el 6,5% como máximo en la participación dentro de las economías de esos tres países. Esto contrasta de manera dramática con la situación de muchas naciones en desarrollo donde el componente de las exportaciones basadas en recursos naturales represente entre el 10 y 85% del PIB.

Los pueblos fantasmas existen

Yendo a un análisis del desempeño de las economías de regiones o localidades dependientes de la actividad minera en Estados Unidos, Canadá y Australia, debemos considerar sus extensiones geográficas lo cual hace que existan diversos recursos naturales en distintos puntos del territorio.

En Estados Unidos esto llevó a que las extracciones de hierro y carbón se hicieran en determinadas regiones pero la industria del acero se instaló en puntos distantes de las zonas de explotación. El cobre y sus variaciones en los costos de producción produjo un traslado de la explotación hacia otros regiones. Mientras que la extracción de oro y plata recorrió el oeste norteamericano de un yacimiento a otro.

En muchas naciones no desarrolladas no existe esa amplitud territorial y lleva a que las explotaciones se realicen en un país y su procesamiento en otros.

Todavía persiste en Canadá y Australia el patrón de impacto regional masivo debido al corto plazo de aprovechamiento de los yacimientos seguido por su abandono total. El "pueblo fantasma" apareció en el lenguaje estadounidense por el carácter de corto plazo de las explotaciones mineras.

Incluso cuando los yacimientos son tan grandes como para sostener las operaciones mineras durante varias décadas, el impacto económico local con frecuencia no es del todo positivo: los cambios tecnológicos y la inestabilidad de los precios de la materia prima y su interrelación con la mano de obra generaron altas tasas de desempleo, caída de los salarios y depresión de la economía local.

A pesar de la riqueza que la minería genera y de los salarios relativamente altos que se paga a los mineros, muchas comunidades mineras norteamericanas no son prósperas y regiones tradicionalmente mineras se han convertido en sinónimo de pobreza persistente . Últimamente algunos de estos lugares han comenzado a recuperarse como resultado de nuevas actividades económicas no relacionadas con la minería y una migración más flexible.

Una mirada atenta al comportamiento de los índices de crecimiento de los salarios y el ingreso per cápita en muchos condados mineros estadounidenses nos muestra que las remuneraciones crecen más lentamente entre un 30 y 50% que en otros condados.

Mientras que algo parecido sucede con el ingreso per cápita en los condados dependientes de la minería donde en el año 2000 una persona percibía u$s9.500 menos por año que el ingreso promedio en otros condados.

Estos datos demuestran por qué en esos lugares su crecimiento poblacional fue negativo.

El desempleo es mayor en los condados mineros y los estudios demuestran que los altos salarios que paga la minería atraen a trabajadores que esperan obtener uno de esos puestos mientras que los obreros que pierden el empleo no abandonan la zona porque es improbable que encuentren un trabajo con un sueldo tan bueno.

Desde la perspectiva del desarrollo económico, sea cual fuera el impacto de la minería a nivel nacional en Estados Unidos, las actividades mineras no han activado el crecimiento sostenido en las regiones donde se llevaron a cabo. Los condados que actualmente dependen de la minería siguen rezagados en la economía nacional.

Esta experiencia regional contemporánea con la minería en una de las naciones más avanzadas del mundo es una advertencia importante para las naciones en desarrollo: la minería causa serios problemas económicos, llevando a mayor desigualdad regional, al desempleo y a la pobreza.

Conclusiones

Los defensores de la minería exageran el rol de ella en el desarrollo económico de Estados Unidos, Canadá y Australia. La minería cumplió un rol muy modesto en el proceso de industrialización y en la definición de sus patrones de crecimiento sostenido. Solo un pequeño porcentaje del producto económico nacional provenía de la minería. En el proceso seguido por estos países la minería fue parte de un patrón complejo de desarrollo institucional, tecnológico y empresarial que abarcó también a la agricultura, la industria, el comercio y los servicios.

a. El razonamiento por "analogía histórica" exagera intencionalmente los pretendidos beneficios económicos de la minería ignorando las condiciones iniciales específicas y las características históricas seguidas por estos países. Tiende a ignorar los cambios en la economía mundial, la tecnología y la organización empresarial desde esos períodos históricos iniciales. También sobredimensionan la importancia de una sola actividad (la minería) en un sector específico (las exportaciones).

b. Como el proceso del desarrollo económico es muy complejo y abarca el desarrollo de instituciones políticas y sociales, valores culturales, infraestructura pública y capital humano junto con la protección efectiva del medio ambiente, las grandes inversiones en un solo proyecto (una mina) en un sector específico de la economía (las exportaciones) por sí mismas rara vez tendrán impacto sostenido significativo para el desarrollo.

c. Estados Unidos, Canadá y Australia eran ya economías desarrolladas de altos ingresos cuando empezaron la explotación industrial de sus recursos mineros a fines del siglo diecinueve y comienzos del veinte. La minería hizo uso intensivo de conocimientos, tecnología y organización empresarial. Las naciones en desarrollo carecen de estas condiciones.

d. Estados Unidos, Canadá y Australia son países con dimensiones continentales que les permitió desplazar las operaciones mineras de un lugar a otro, los perjuicios económicos a nivel local y regional fueron asimilados y compensados en una economía nacional de grandes dimensiones, además de que estos países no dependían de uno o unos cuantos productos minerales.

e. El impacto económico local de la minería en Estados Unidos, Canadá y Australia usualmente no fue positivo, ocasionó pobreza persistente o produjo pueblos fantasmas. En las últimas décadas, las comunidades dependientes de la minería en estos países desarrollados continúan rezagadas en relación a otras economías regionales y a nivel nacional.

f. Mientras más dependiente de la minería ha sido un país en desarrollo, más deficiente ha sido su desempeño económico. La minería no ha contribuido a sacarlas de la pobreza.

g. La inversiones mineras en los países en desarrollo no pueden estimular el crecimiento económico sostenido. Por el contrario, pueden aumentar el conflicto social, expandir la corrupción gubernamental y empresarial y desplazar la inversión en el capital humano.

h. Cuando la explotación minera ocurre en un contexto constituciones sociales, políticas y económicas subdesarrolladas, las altas rentas que genera hacen que se despilfarre la riqueza del recurso renovable mientras que se incrementa el conflicto social y produce daños casi irreparables en el medio ambiente. Esto puede volver a una nación en desarrollo más pobre de modo definitivo.


Desde: http://www.noalamina.org/mineria-informacion-general/impactos-de-la-mineria/mineria-cavarnos-la-propia-tumba-2

martes, 24 de enero de 2012

FORTUNA SILVER-MINERA CUZCATLÁN, RESPONSABLE DE LA VIOLENCIA


PRONUNCIAMIENTO
LA MINERA CUZCATLÁN, RESPONSABLE DE LA VIOLENCIA EN SAN JOSÉ DEL PROGRESO

§        Organizaciones y comunidades del Valle de Ocotlán y Sierra Norte exigen castigo a la empresa minera Cuzcatlán.
§        Demandan desaparición de poderes en San José del Progreso.
A partir de los lamentables sucesos del día 18 de Enero de 2012, agresión en la que perdiera la vida nuestro compañero Bernardo Méndez, la población de San José del Progreso se encuentra severamente lastimada. Para San José del Progreso no hay ley, justicia o poder que pueda contra la empresa minera Cuzcatlán, ya que los agravios cometidos a la población son amparados   por las autoridades municipales y estatales del estado de Oaxaca.
El gobierno estatal pretende desligar la grave problemática suscitada a raíz de la entrada de la empresa minera, y llevarlo al ámbito interno de lucha por el poder municipal, cuando esto no es así.  Manifestamos que la lucha de la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán (CPUVO) no ha tenido en ningún momento el objetivo de conseguir algún puesto o cargo político municipal, nuestro planteamiento principal desde principios de 2008 ha sido la cancelación definitiva  del proyecto minero “San José”. Los conflictos sociales y políticos que han terminado con la vida de 3 personas, se deben a la entrada de la empresa minera Cuzcatlán, sin el consentimiento de la población y no por el control y poder del municipio como lo expresan las diferentes instancias del gobierno estatal.
Queremos manifestar que la CPUVO siempre ha privilegiado los canales de diálogo con el gobierno municipal y estatal, sobre todo durante 2011, para solucionar los conflictos políticos y agrarios derivados de la entrada de la empresa minera. El gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo, nunca nos otorgó una audiencia pública, por el contrario guardó silencio. Durante éste año, estuvimos también denunciando que las autoridades municipales contaban con pistoleros para amedrentar a la población, tampoco obtuvimos respuesta.
Queremos alertar que  a nivel estatal se quieren seguir implementando proyectos mineros con el respaldo del gobierno federal, estatal y en algunos casos también municipales, por encima de la decisión de los ejidatarios/as, comuneros/as y ciudadanos/as en general.  Advertimos que todo proyecto que no sea consultado a los pueblos y comunidades de Oaxaca, como lo establecen los tratados internacionales de derechos humanos, desencadenará conflictos graves y actos que lamentablemente terminan en violencia al no encontrar canales institucionales de resolución de conflictos, sobre todo relacionados con la posesión de la tierra, el territorio y los recursos naturales.
En este sentido las comunidades y autoridades municipales y agrarias de Capulalpam de Méndez y los Ocotes han mostrado su solidaridad y las mismas preocupaciones en relación a la entrada de proyectos mineros.
La CPUVO responsabiliza a la empresa minera Cuzcatlán, filial de la empresa canadiense Fortuna Silver de las violaciones a los derechos humanos, confrontaciones, heridos y muertos suscitados en la comunidad desde 2006; al Gobierno del Estado de Oaxaca por su omisión en el conflicto iniciado por la empresa minera; al presidente municipal Alberto Mauro Sánchez Muñoz y al cabildo municipal de San José del Progreso por cualquier acto que atente contra la integridad física y moral de los integrantes de la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán.
La CPUVO exige al Congreso del Estado y al Ejecutivo Estatal la revocación del mandato de las autoridades municipales de San José del Progreso, ya que son ellos quienes mandaron a disparar contra la población el día 18 de Enero de 2012.
La CPUVO y  las Autoridades Municipales y Agrarias  de Capulalpam de Méndez y los Ocotes exigimos al gobernador del estado, Gabino Cue Monteagudo  nos otorgue una audiencia pública inmediatamente para comunicarle nuestras preocupaciones en relación a los proyectos mineros en el estado.
Exigimos se garantice justicia para el pueblo de San José del Progreso y el castigo a los responsables del crimen cometido contra los compañeros Bernardo Méndez Vásquez – quien murió un día después de la agresión, a causa de las heridas graves provocadas por impactos de arma de fuego y Abigail Vásquez Sánchez -quien reporta su estado de salud como delicado-. Asimismo exigimos conjuntamente una solución de fondo a la problemática de San José del Progreso, la cual consiste en la salida de la empresa minera Cuzcatlán del municipio.

Oaxaca de Juárez, Oaxaca, 23 de Enero de 2012

Atentamente:
Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán; Autoridades municipales y comunales de Capulalpam de Méndez; la comunidad de Los Ocotes; y el Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios: Servicios del Pueblo Mixe, SER Mixe A.C., Servicios para una Educación Alternativa, EDUCA A.C., Unión de Organizaciones de la Sierra Juárez de Oaxaca, UNOSJO S.C., Centro de Derechos Indígenas Flor y Canto A.C., Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, PRODH A.C., Centro de Derechos Humanos Bartolomé Carrasco Briseño, BARCA A.C.